La profesora todos los días nos mandaba una página, que no una hoja. Lo dejaba bien claro. (Gracias a los cuadernos Rubio, he aprendido la diferencia entre página y hoja).
Por ello, nunca los he utilizado con mis alumnos, simplemente porque creo que la redacción de los problemas no es del todo clara y lleva a la ambigüedad y porque los problemas no están adecuados a la realidad social de hoy en día ni a los intereses de nuestros alumnos.
Particularme, con mis alumnos acostumbro a trabajar el cálculo mental ligado a problemas orales que yo le planteo. Les propongo cantidades reducidas y situaciones de su entorno fácilmente imaginables, que le permitan desarrollar de forma personal estrategias globales de aprendizaje.
Me he encontrado con alumnos de Infantil que eran capaces de resolver problemas de manera intuitiva: Si tengo 2 caramelos y me como 1, ¿cuántos me quedan? Los alumnos respondían correctamente 1.
Al llegar a la etapa de primaria y una vez que han aprendido el algorimo de la suma y de la resta, tenían dificultades para resolver con éxito problemas aditivos y sustractivos. Preguntaban: ¿Este problema es de suma o de resta?
¿Qué ha ocurrido? No soy una experta en matemáticas, pero mi experiencia me dice, que al enseñarles a sumar y a restar, los alumnos se han "desprogramado" y han dejado de emplear sus métodos personales e intuitivos de aprendizaje y están empleando ahora el patrón que les enseña: cuando el problema dice "en total" sumo y cuando aparece "quitar" o "cuánto falta" resto.
Resolver un problema por el "cuento de la vieja" que tantas veces he escuchado de niña y que era tan poco aceptado por los profesores porque no utilizaba el método que ellos explicaban, no es más que una estrategia particular que se emplea para dar solución a diversas situaciones.
Es necesario volver a "programar" a nuestros alumnos para que descontextualicen los problemas y los lleven al marco de su experiencia, imaginándolos, viviendolos porque así desarrollarán su lógica y aprenderán a generalizar y no a realizar "problemas sin salida" a la vida real. Muchas veces, los problemas que le proponemos los llevan a una carretera cortada que no lleva a ninguna parte.
Y con los cuadernillos de cálculo pasa algo similar. Sus páginas están llenas de cuentas que no obedecen a ningún criterio, salvo el del número de dígitos (sumandos con 2 digitos 3, 4...) . Con ello sólo se eleva la complejidad del cálculo sin aportar estrategias que permitan a los alumnos dominar la trastienda del cálculo.
Tomando las palabras de José M. de la Rosa Sánchez, es neceario:
-Trabajar los complementos del 10 con los cuales los alumnos comprendan y construyan el resto de números y operaciones.
-Trabajar la combinación de números para comprender las relaciones existentes entre ellos. Sumar todos los número con el 9, con el 8,… sumar dos veces el mismo número 5 + 5, 7 + 7.
-Proponer operaciones que tengan en cuenta la graduación de dificultad. Pero que esta no consista solo en pasar de números de una, a dos, tres o cuatro cifras. Dentro de cada una existen una graduación de dificultad que permite que el alumno progresivamente conozca los entresijos de las operaciones y las dominen fácilmente.
Pues bien, ahora nos podemos descargar los Cuadernos Rubio para nuestro Ipad.
Según Enrique Rubio, gerente de Cuadernos Rubio “Se trata de una apuesta por las nuevas tecnologías que parte de nuestro compromiso con la educación. La aplicación nos permite llevar nuestra metodología a un público amplísimo gracias a que hemos fijado un precio de descarga muy asequible”. La descarga de la aplicación es gratuita e incorpora algunos cuadernillos de demostración que se pueden comprar de forma completa por 0,79€.
i Cuadernos by Rubio estará disponible desde el 8 de junio y se dirige a niños de entre 3 y 12 años con más de 20 niveles de dificultad. Para los estudiantes de primaria la aplicación dispone de dos colecciones que se centran en reforzar el aprendizaje de operaciones y problemas matemáticos de forma divertida. Con el objeto de facilitar la resolución de los distintos ejercicios la utilidad contiene un bloc de notas y un “búho tutor” que corrige las respuestas y el desarrollo de las actividades.
En la categoría “Educación infantil” de la app los niños de hasta 6 años pueden divertirse con una extensa variedad de dibujos para pintar y contornear que potencian el desarrollo intelectual y motriz. En todas las colecciones los usuarios pueden crear un perfil propio, personalizado con sus rasgos y diversos extras, así como ganar medallas al completar los distintos niveles.
Verdaderamente, los Cuadernos Rubio se han modernizado en cuanto a la forma. Habrá que comprobar si en el fondo también se observan los cambios necesarios para convertir el cálculo en un verdadero aprendizaje y no sólo se habrá cambiado el cuadernillo por una tableta.
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